El secreto para lograr una fragancia intensa y duradera en velas aromáticas
radica en el uso correcto de las proporciones de aceites esenciales. Se recomienda mantener la cantidad de aceite esencial entre el 6 % y el 8 % del peso de la cera para obtener una fragancia perceptible sin que resulte abrumadora. Como guía práctica, para cada 100 gramos de cera, se sugiere añadir entre 6 y 10 gotas de aceite esencial. Para una vela de 16 mililitros, unas 6 gotas pueden ser suficientes , mientras que para un frasco de 200 ml se recomienda aproximadamente 160 g de cera, dejando espacio para la mecha y el perfume.
Es crucial añadir los aceites esenciales cuando la cera está entre 60 °C y 65 °C; si se añaden a una temperatura más alta, el calor puede hacer que el aroma se evapore, y si se añaden a una temperatura más baja, no se mezclarán adecuadamente. Además, para velas destinadas a espacios específicos, se ajustan las proporciones: entre el 5 % y el 7 % para recibidores, entre el 4 % y el 6 % para escritorios, entre el 3 % y el 5 % para comedores, y entre el 2 % y el 3 % para dormitorios. En velas para exteriores, donde se busca una mayor presencia y expansión del aroma, se recomienda un rango del 10 % al 15 %. Para velas diseñadas específicamente para perfumar un espacio, se sugiere un porcentaje entre el 5 % y el 8 % para un aroma más pronunciado y duradero.